jueves, abril 02, 2009

El nuevo día arácnido

Hace un año y tres meses que empezó Un Nuevo Día, la saga de Spider-Man que rompió de golpe y porrazo con la continuidad que se venía sosteniendo, con sus más y sus menos, desde 1962. Como lo prometido es deuda, a continuación tenéis de qué va la cosa y la opinión del menda. 

Aviso: Esto no pretende ser un post imparcial, sino un análisis desde el punto de vista de un fan de Spider-Man que después de 14 años ha decidido dejar las drogas arácnidas. Podéis debatir en los comentarios.
 
 
1. ¿De dónde veníamos?

La historia editorial de Spider-Man es larga e intrincada. Comenzó en el Amazing Fantasy 15, último número de la colección, en agosto de 1962. A finales de ese año, el primer número de The Amazing Spider-Man se puso a la venta, serie que se ha mantenido hasta la actualidad. Por el camino se fueron creando nuevas colecciones para explotar el filón: The Spectacular Spider-Man, Web of Spider-Man, Peter Parker: Spider-Man y algunas más.


En todo este tiempo, el personaje de Peter Parker ha evolucionado paso a paso, en un principio más rápidamente que ahora, que lleva el lastre de ser una franquicia con vistas a durar lo que sea necesario. Empezó con 15 años en el instituto, pasó a la Universidad, conoció al primer amor de su vida, Gwen Stacy, que murió a manos del Duende Verde, alter ego de Norman Osborn y padre de su mejor amigo Harry. Norman murió hipotéticamente poco después empalado por su propio deslizador. Peter empezó a salir con Mary Jane, relación que acabó al mismo tiempo que se graduaba. Tras dejar sus estudios de post-grado y mientras se aliaba con la Gata Negra, se enfrentaba al Duende o se encontraba cierto traje alienígena que sería la semilla de la creación de Veneno, Peter y MJ se reencontraron y empezaron a tener una amistad bastante profunda.

En esto que en 1987 en Marvel decidieron casar al personaje. La cosa vino de sopetón, debido en realidad a que en las tiras de prensa del personaje (ajenas a la continuidad del cómic), Stan Lee, el guionista original y co-creador del personaje, decidió hacer eso mismo. La elegida era MJ, su pareja en la tira y su mejor amiga en el cómic, y así en el Amazing Spider-Man Annual 21, la pareja contrajo matrimonio.

Pasada la mítica historia de La Última Cacería de Kraven (una de las mejores del personaje) y el origen de Veneno en el Amazing Spider-Man 300, entramos en los años noventa, época de falta de ideas en el sector y de proliferación de dibujantes estrella que se dejaban llevar por la espectacularidad y poco aportaban a los guiones. Entonces llegó la muerte de Harry Osborn, contada con maestría por J.M. Dematteis (ya sabéis, el de la JLI, caballeros) y dibujada por Sal Buscema, en el Spectacular Spider-Man 200. En dicha historia, Harry, enloquecido por la sombra de su difunto padre y calzado con las mallas del Duende Verde, le hace la vida imposible al matrimonio Parker, hasta que en el último momento salva a su hijo y a la pareja, poco antes de morir intoxicado por la fórmula del duende.

Poco después comenzó la más enrevesada saga del trepamuros: La Saga del Clon. En ella se rescata una historia de 1975 en la que un profesor de Peter Parker, Miles Warren (alias el Chacal) clonaba a Gwen, de la que estaba enamorado, y al propio Spider-Man. El clon, hipotéticamente muerto, volvía para revelar que se había pasado cinco años en el exilio y sembraba la duda sobre quién era el clon y quién el original. Así, Ben Reilly, el clon de Spider-Man, acababa creyendo ser el original y merodeaba por Nueva York vestido primero como Araña Escarlata (imagen de este párrafo) y después como el nuevo Spider-Man, mientras Peter y una embarazada MJ se iban de la ciudad para empezar una nueva vida. Durante la historia, además, moría tía May, en el Amazing Spider-Man 400, otro número y muerte redondos, por el DeMatteis de antes.

La historia finalmente se resolvía con Ben muriendo, Norman Osborn reapareciendo desde los muertos para revelar que él estaba detrás de todo, oculto en Europa, Peter recuperando su identidad, seguro de que es el original, y la hija de los Parker, la pequeña May recién nacida, siendo secuestrada por el propio Osborn. Tras un año de historias normaluchas de Spider-Man, parecía que May iba a volver a casa con sus padres, pero entonces hizo acto de presencia la cobardía de Marvel: en su lugar, trajeron de vuelta a la anciana tía. Del bebé nunca más se supo. La primera estaca ya estaba clavada en la credibilidad de la historia de Spider-Man. 
 
Tras un par de años de vagar sin rumbo e intentar que unos Peter y MJ ya de veintimuchos parecieran más jóvenes, un guionista supo hacerse con las riendas del destino arácnido: J.M. Straczynski (¿qué tendrán las siglas J.M.? XD). La nueva etapa presentaba a un Peter más adulto, con nuevo trabajo (profesor de instituto) y con una tía May que descubría, por fin, el secreto de su sobrino, y actuaba como un personaje fuerte y en definitiva, útil. Mientras, el matrimonio Parker empezó a volverse más fuerte. Y así, con el Amazing Spider-Man 500, el trepamuros había recuperado su grandeza.

Y entonces, ¿qué pasa?

Peter se une a los Nuevos Vengadores, supergrupo marveliano nacido a raiz de la disolución de los Vengadores originales. Entonces estalla la Civil War, macro-crossover que afecta a todas las publicaciones de Marvel durante 2006 y en la que se enfrentan dos bandos de superhéroes: los que apoyan un registro super-humano (los superhéroes deben desenmascararse y trabajar para el gobierno) y los que se oponen (para no iniciados, sí, es como en Watchmen). Entonces en Marvel se atreven: Peter, en principio con la olla comida por Tony Stark (Iron Man), se desenmascara en público, ante el mundo. Al cabo de poco Peter se rebela contra la ley y, al vencer el bando pro-registro la guerra, se convierte en un fugitivo. Por orden de Kingpin, su tía May recibe un disparo de un francotirador y se encuentra a las puertas de la muerte. Un enfurecido Spider-Man le pega una soberana paliza a Kingpin en la cárcel y entonces se pregunta qué debe hacer, y se va en busca de ayuda. Aquí acaba la coherencia.

2. El diablo metió la mano

Un Día Más es la historia publicada a finales de 2007 que termina de forma abrupta la historia que se venía contando en Spider-Man desde la Civil War, y también desde mucho antes. Última aventura escrita por Straczynski y con grandes metidas de mano de Joe Quesada, el editor jefe de Marvel, la saga inicia la nueva etapa que muchos fans aborrecen por culpa de la estupidez de su propuesta:

Sin nadie más a quién acudir, a Spider-Man se le aparece Mefisto, un ser de la mitología marveliana que vendría a ser como el diablo. Propone a la pareja que salvará la vida de tía May... a cambio de su matrimonio.

¿Cómo se cambia un matrimonio por una vida? ¿Quemando los papeles? Qué va, hombre. Se pilla la continuidad arácnida y se usa para limpiarse el culo.

La cosa es la siguiente: Peter y MJ aceptan el trato con el diablo. Mefisto les dice que eliminará el matrimonio de la existencia, es decir, será como si nunca se hubieran casado, o algo así, que no lo deja claro. Tras un último día juntos (que no se narra, y eso es lo gracioso: el título de la saga no tiene sentido), Mefisto realiza el pacto. Y empieza la absurdez.

Peter se despierta en casa de su tía May, que le está preparando tortitas, como cuando tenía quince años. Sale en bici y se va a una fiesta a un ático, una fiesta que celebra... el regreso de Harry Osborn "de Europa" (sí, Harry estaba muerto). Peter lo encuentra totalmente normal. En un momento en concreto dice que nunca ha estado casado. MJ aparece brevemente y se va, suponemos que él y Peter están enfadados. Todos los asistentes a la fiesta brindan por un nuevo día.

Y al lector se le queda cara de "WTF?". ¿De qué puñetas va esto? ¿Qué ha hecho Mefisto, ha eliminado de la historia el matrimonio, creando una realidad alternativa, arrastrando de paso años de continuidad? ¿Por qué Peter parece más joven y estúpido? ¿Cómo es que nadie recuerda la identidad de Peter, ni siquiera May? ¿Qué hace Harry vivo? Todas esas preguntas se las hace Straczynski, un mandado al que le han encalomado la saga de marras, y en Marvel simplemente le responden con un "es magia, no tenemos por qué explicarlo". La ley de Xena explicada en un capítulo de Los Simpson: siempre que pase algo ilógico, lo hizo un mago. Strac se va y una plantilla de nuevos guionistas y dibujantes se encargarán del marrón de conducir al nuevo Spider-Man lobotomizado, que nadie sabe de dónde viene ni a dónde va.

3. Asesinato de un personaje (contiene SPOILERS)

Bueno, os preguntaréis, ¿a qué se debe este despropósito argumental? ¿Qué fin tiene? Pues es ni más ni menos que un capricho del Sr. Quesada, el editor jefe, que considera que un Spider-Man casado es aburrido. Así que se carga la misma historia que se creó bajo su mandato, iniciada en Civil War, elimina de un plumazo todos los cambios de la mejor etapa de Spider-Man en muchos años, la de Straczynski, y resucita a Harry porque sí, porque le parece un buen personaje. ¿La explicación? No la hay.

Spider-Man de repente es un personaje atemporal y sus historias son el capricho de un editor que se jacta de hacer evolucionar al Universo Marvel con macrosagas que lo sacuden cada año pero que no deja avanzar al personaje que más ha evolucionado de todos hasta ahora. El Spider-Man de Un Nuevo Día, que empieza en el Amazing Spider-Man 546 y ya va por el 590 (a ritmo de tres números por mes) no ha estado nunca casado o no lo recuerda, las referencias al pasado son nímias porque nadie tiene claro de qué va exactamente y nadie se cuestiona qué hace Harry vivo. No tenemos ni pajolera idea de qué va todo, pero en Marvel les parece suficiente y le toman el pelo a lectores de encefalograma plano que se tragan todo lo que le echen (después están los otros que le buscan explicaciones a todo que no están implícitas en los cómics, mis respetos hacia vosotros, valientes).

¿Qué hay en la nueva etapa arácnida? Hay secundarios nuevos, en parte refritos de los anteriores: una nueva novia para Harry (que estaba casado y con hijo y no se hace ninguna referencia a ello), una forense muy agwenstacyada, un nuevo editor para el Bugle sin escrúpulos y una panda de villanos a cada cual más imaginativo: Mr. Negativo (típico mafioso pero... con la piel en negativo), Amenaza (otro duende más), Freak (un monstruo, ni más ni menos), una Kraven en femenino (desde la muerte del original, han aparecido ya dos hijos de Kraven intentando suplantarlo, con esta hacen tres) y una especie de Conmocionador. Fantástico, todo muy nuevo y fresco. Por si faltaba poco, aparece una especie de heroina, Jackpot, idéntica a MJ en su cabellera y forma de expresarse, pero que al final... resulta no ser nadie conocido. ¡Fantástico también!

Y así podríamos pasarnos líneas y líneas, hablando de las bondades de este nuevo y absurdo día que no es más que un refrito de historias de Spider-Man de hace diez, veinte o treinta años, pero contadas sin gracia y en una línea temporal indeterminada.

Las ventas caen, pero no lo suficiente, así que la agonía sigue. En todo este tiempo, Dan Slott, uno de los guionistas, se ha atrevido a intentar buscarle sentido a esta locura que en principio no la tenía. Amante de la continuidad y que habría dado muchísimo más de si en un contexto coherente, nos trae de vuelta a MJ en el arco llamado Peter Parker Paparazzi (AS 559 a 561), en el que si, Peter se hace paparazzi, profesión de la cual despotricaba a muerte en historias de hace diez años, y con razón. Aparte de eso, aparece MJ con nuevo mozo, y nos deja ver que ella lo recuerda todo, es decir, todo lo anterior a este sinsentido. Pues qué bien. Seguimos teniendo al prota lobotomizado, y al final del arco la pelirroja se vuelve a ir.

El segundo asalto de Slott es Nuevas Formas de Morir, historia de seis partes (AS 568 a 573) ahora mismo publicándose en España y que cuenta con varios reclamos: Norman Osborn y sus Thunderbolts (grupo que lidera desde la guerra civil), Veneno, un nuevo villano llamado Anti-Veneno (¡Fantástico one more time!) que resulta ser Eddie Brock (Veneno en estos momentos es Mac Gargan, el antiguo Escorpión) y el regreso del dibujante estrella de Spider-Man: John Romita Jr.

La historia es quizás lo más potable de la nueva etapa, y cuenta con varias ironías al respecto del pacto con Mefisto, Spider-Man parece volver a estar en contacto con la continuidad de Marvel y se resuelven varias tramas dejadas a medias antes del reseteo, como es el destino de Brock. Aun así, resulta patético ver a Norman incapaz de recordar que Peter es Spider-Man ni cuando tiene la prueba delante de sus narices, Parker pensando en voz en off "es cierto, no recuerda quién soy, lo que hicimos funcionó", dejándonos sin saber de quién diablos habla, si es Mefisto u otro ente, y soportando a una tía May que ya no aporta nada y que estaría mejor muerta (nunca debió resucitar, aunque Strac le diera un sentido en la trama, ya se ha perdido al olvidar la identidad de su sobrino). Hablando de la identidad, ni siquiera Daredevil, personaje que aparece en una de las historias, recuerda quién se esconde tras la máscara arácnida. Spider-Man y Daredevil han compartido muchas cosas en sus identidades civiles. Ahora todo eso se ha ido al cuerno (¿nunca mejor dicho?).

Poco a poco se intentan tapar grietas de forma chapucera. Peter habla de cuando estuvo viviendo con MJ. Quesada dice que todo es igual, solo que nunca se casaron, solo vivieron juntos. Eso explica muchas cosas, pues claro, entonces... ¡entonces Mefisto solo es gilipollas y Un Día Más no tiene sentido! A finales del año pasado, se explicó en otra historia, y a modo de flashback de dos páginas, por qué Harry estaba vivo. A Peter se le ocurre preguntárselo mientras van en coche, del rollo "ey, por cierto, ¿tu no estabas muerto?" y entonces Harry nos explica que no, que no estaba muerto, que solo estaba yonqui y pensaba que se moría, que Norman se lo llevó a Europa con la ayuda de Misterio, que le creó un duplicado del cadáver (recordemos que Norman estaba detrás de la saga del clon. Mmm, quiero falsear el cadáver de mi hijo, ¿a quién recurro, a un clonador o a un tío con una pecera en la cabeza que hace ilusiones? Está claro, al segundo) y que recuperó la memoria al cabo de mucho.

Y así es como una resurrección sacada de la patilla se explica un año después. Las resurrecciones en el mundo del cómic son constantes y algunas con mucha desfachatez, pero normalmente se suelen explicar al momento, y se les saca partido. Se dice que un guionista profesional nunca deja ver sus hilos en el escenario. Pues en Un Nuevo Día solo falta que aparezca Quesada o Slott o alguien en la historia parándola un momento y explicando a los lectores que "hemos hecho esto porque nos parecía chachi".

Así llegamos al momento actual. Tras una nueva saga llamada Character Assassination (Asesinato de un personaje, un nombre con mucha ironía), que revela cosas de la historia empezada con Un Nuevo Día... pero nada que tenga que ver con el reseteo, sino de cosas sobre los nuevos personajes que poco interesan; los antiguos lectores del trepamuros, desesperanzados, contemplamos como a pesar de las bajas ventas (excepto por el golpe de efecto del AS 583, número en el que aparece Obama), Spider-Man sigue en su mundo ilógico de cartón piedra que se cargó una prometedora trama iniciada en Civil War, destrozó su continuidad y se va arreglando con parches estúpidos que a estas alturas ya no queremos. El Amazing Spider-Man 600 está a la vuelta de la esquina. En él, dicen, se explicará "lo que pasó realmente en el día de la boda".

Pero lo que pasó realmente ya lo sabemos. Peter y Mary Jane se casaron. Tuvieron sus más y sus menos y llegaron hasta la guerra civil. Y ahí se queda su historia, ya que esto no hay por donde cogerlo. Tal vez algún día algún guionista competente y con amor por la continuidad cree una miniserie a partir de ahí y cierre la historia de un personaje que ha evolucionado hasta donde ha podido y se ha quedado estancado. Por lo que a mi respecta, Spider-Man sigue desesperanzado, buscando alguien que pueda salvar a su tía y a sí mismo del destino que le aguarda, mirando las estrellas, al final del Amazing Spider-Man 543. Tal vez suplicando porque algún día se recupere de esta bazofia. O eso es lo que opinamos muchos, para otros ya les va bien.

Ha sido un largo camino con el trepamuros que para mí, terminó hace un año. Al fin y al cabo, es solo un "estúpido cómic de superhéroes". Haciendo esta etapa que parece un manual de cómo NO guionizar nada NUNCA, no están dignificando el medio precisamente, ni haciendo que se tome en serio. Ellos sabrán. Al final, la ilusión se rompe, Peter Parker no es un personaje, es un icono, que es igual a merchandising y dólares. Y parece que así se quedará. Quesada tiene el poder de deshacerlo, pero no quiere, aunque la serie haya perdido la mitad de las ventas, y baje mes tras mes.

Tal vez hace falta que a alguien le recuerden aquello de que un gran poder... conlleva una gran responsabilidad.

Próximo post: Final del volumen uno.

2 comentarios:

Matalascañas dijo...

Pues vaya, ahora va Slott y en el AS 590 SPOILERS desenmascara de nuevo a Spider-Man delante de los 4F FIN DE LOS SPOILERS.

El guionista estrella de la nueva etapa boicoteando el reseteo como puede. Con dos huevos!

Lobo dijo...

Comentare porque marvel no saque mas tondadas XD. Ya esta!!